Una mañana me levanté temprano
y recordé
todos aquellos momentos del pasado
que me hicieron aprender.
Una mañana supe
que muy pronto iba a cambiar mi vida
cuando la ruleta del destino
girase de nuevo otra vez.
La ruleta ha girado
y las cosas han cambiado
pero en esencia
yo sigo siendo la misma:
sigo recordando
todos los momentos vividos
de los cuales aprendí
que lo importante es vivir
sin mirar atrás
para disfrutarlo todo
y sentir la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario